LA EVALUACIÓN DE LAS ACTITUDES, VALORES Y NORMAS DESDE EL ÁREA
              DE EDUCACIÓN FÍSICA.


La realización regular y sistemática de una actividad física ha demostrado ser una práctica sumamente beneficiosa en la prevención, desarrollo y rehabilitación de la salud, así como un medio para forjar el carácter, la disciplina, la toma de decisiones y el cumplimiento de las reglas beneficiando así el desenvolvimiento de la persona en todos los ámbitos de la vida cotidiana. Hoy en día esta visión ha sido aceptada por muchos, sin embargo, a lo largo del tiempo, ha tenido sus períodos de auge y regresión.
La práctica deportiva no se limita solamente a los atletas de elite, deportistas de alto rendimiento, gente joven, etc. Todo ser humano puede y debería realizar alguna actividad deportiva acorde a sus necesidades y sus posibilidades físicas.


Educación física. Definición, propósitos, áreas y fines.

 

La Educación Física es un eficaz instrumento de la pedagogía, por cuanto ayuda a desarrollar las cualidades básicas del hombre como unidad bio-psico-social.
Contribuye a la acción educativa con sus fundamentos científicos y sus vínculos interdisciplinarios apoyándose entonces en la filosofía, la psicología, la biología, etc.
Tiene una acción determinante en la conservación y desarrollo de la salud en cuanto ayuda al ser humano a ajustar pertinentemente las reacciones y comportamientos a las condiciones del mundo exterior. Específicamente, en el niño, ayuda a sobrellevar las agresiones propias de la vida cotidiana y del medio y a afrontar el presente y el futuro con una actitud positiva.
Promueve y facilita a los individuos el alcanzar a comprender su propio cuerpo, sus posibilidades, a conocer y dominar un número variado de actividades corporales y deportivas, de modo que en el futuro pueda escoger las más convenientes para su desarrollo y recreación personal, mejorando a su vez su calidad de vida por medio del enriquecimiento y disfrute personal y la relación a los demás.
Con la entrada en vigor de la LOGSE se introducía, entre otras, una gran novedad: la programación de las actitudes, valores y normas y su inclusión en los diseños curriculares.
Si bien entre los docentes no hubo una gran problemática a la hora de concretar contenidos y formular objetivos, sí supuso una gran dificultad su evaluación, siempre que se tratara de realizar de un modo sistemático y más o menos objetivo.
Esta evaluación, cuando se hace, generalmente no deja de ser una apreciación subjetiva del profesional.
La Educación Física dispone de un marco privilegiado para la aparición y desarrollo de conductas, valores y normas, no sólo por las características propias del área, sino por el espacio donde se desarrolla, el patio o el gimnasio, libre de obstáculos y ambiente propicio para que se interrelacionen los alumnos/as.
El juego es el vehículo que dinamiza la mayor parte del ambiente convivencial de los niños/as tanto por su poder de generador de relaciones sociales como de desarrollo psico-afectivo.
Con esta tesitura, desde el área de la Educación física, tratamos también de plasmar de forma práctica el mayor número de adjetivos con los que adornamos teóricamente a la evaluación en nuestros diseños: formativa, diagnóstica, cualitativa, continua, criterial...
En el curso 2007-2008 tras una reunión de Departamento, y con el visto bueno de la dirección, se decidió reflejar de una manera más directa en la evaluación el desarrollo de estos contenidos, sobre todo en aquellos alumnos que realmente los trabajan adecuadamente.
Hemos tenido en cuenta también que esta potenciación de las actitudes se dan de forma muy importante en la Educación Física, de forma más directa en comparación con el resto de materias.
Así mismo nuestra intención era trasladar a la educación primaria lo que ya se empezó hace tres cursos en secundaria, como consecuencia de la puesta en práctica del proyecto de Departamento (véase la Página Web)
Las actitudes, valores y normas entre las planificadas en nuestras Unidades Didácticas en las que más se va a incidir son:
· Aseo personal
· Respeto del material e instalaciones
· Respeto a los compañeros
· Respeto de las reglas o normas en los juegos
· Interrupciones de la clase
· Respeto al sexo contrario (formación de parejas mixta)
· Deportividad
· Esfuerzo personal


Durante el trimestre, y a la finalización del mismo, el profesor/a valorará con los medios de observación adecuados los resultados obtenidos por cada alumno, y lo reflejará en el boletín de evaluación con los símbolos acordados (A, M y/o B), correspondiendo la actitud mas alta a un porcentaje estimado de entre el 10% y el 20 % de la nota obtenida en la consecución del resto de objetivos, así hemos decidido que aquel alumno que obtenga la actitud más alta, sume 1 punto a la media obtenida, en lugar del 0,20 acordado con anterioridad, en los casos en que la actitud sea media o baja, la puntuación quedaría como ya se estipuló en su momento.
Veamos, a continuación, en qué consisten las actitudes que van a ser objeto de seguimiento:
Aseo Personal: los alumnos/as deben traer a clase una toalla y jabón para asearse al término de la sesión. El control será diario.
Respeto del material e instalaciones: si importante es el respeto en el uso de los recursos comunitarios, más si cabe lo es en nuestra área. Todos los profesionales de la Educación Física somos conscientes de las penurias que sufrimos a la hora de solicitar más material, con los presupuestos de los que disponemos, a veces irrisorios.
Respeto a los compañeros: el respeto a los demás es indispensable para que le respeten a uno mismo. Se trata de que los alumnos/as tomen conciencia de lo negativo que son conductas como: reírse de un compañero cuando realiza una tarea motriz y no la efectúa adecuadamente a pesar de poner todo su esfuerzo, los comportamientos agresivos, discriminatorios...
Respeto a las reglas o normas de los juegos: partiendo del concepto de que sin reglas el juego es aburrido, los niños/as que son duros jueces con los demás deben aprender no sólo a respetarlas sino a que los otros también lo hagan.
Interrupciones de clase: las tres o dos horas de Educación Física de las que disponemos semanalmente, según los Ciclos, nos parece insuficiente. Por tanto trataremos de aprovechar el máximo del tiempo que disponemos en cada sesión. Las interrupciones de los alumnos/as, siempre que no aporten nada a la clase, nos reducen ese tiempo.
Respeto al sexo contrario (formación de parejas mixtas): los roles y actitudes sexistas inculcados desde el nacimiento en los niños/as son difíciles de erradicar. Nosotros podemos aportar nuestro grano de arena, no sólo realizando actividades con una amplia variedad de situaciones en las que se generen diversos tipos de agrupamientos, sino introduciendo la figura de la pareja como dinámica para que los niños interactúen con niñas y viceversa. Cuando se realicen tareas por parejas, éstas deben ser mixtas.
Deportividad: valor que lleva asociado otras actitudes: saber ganar y perder, colaboración, oposición y respeto al contrario, juego limpio...
Esfuerzo personal: todos sabemos, y especialmente en Educación Primaria, que los alumnos/as suelen esforzarse al máximo porque realizan actividades o tareas que les gustan, gracias a la motivación intrínseca del área. No seamos nosotros los que la desaprovechemos, con exigencias fuera del alcance los niños/as o con sesiones aburridas. Trataremos de hacer conscientes a los niños/as que, aquellos que muestren un esfuerzo por encima de su límite, serán premiados. Aunque esa valoración sea muy subjetiva, lo más importante es que el alumno/a sepa que esa actitud es importante y se valora positivamente.